Conseguir inversionistas es parte importante para el crecimiento de tu emprendimiento y no es tan difícil como parece. Puedes dar en el clavo con tu pitch a los inversionistas si lo preparas y planificas adecuadamente para conseguir los fondos que necesitas en tu emprendimiento.
No te muestres con un trabajo poco profesional que ahuyente a tus posibles inversionistas en vez de que te brinden su apoyo.
A continuación, te presentamos nueve errores que debes evitar si quieres maximizar tus posibilidades de conseguir financiamiento para tu emprendimiento.
1) No preparar un resumen ejecutivo
Es posible que un inversionista privado no tenga tiempo de leer tu plan de negocio de más de 100 páginas. Lo más sensato es preparar un resumen y una presentación que describan tu emprendimiento de manera rápida y efectiva.
Tu pitch a los inversionistas debe incluir lo siguiente:
- El punto de venta único de tu negocio
- El público objetivo
- Tamaño del mercado
- Los ingresos y gastos previstos
- La estrategia de salida
2) Desconocer la competencia del mercado
Es frecuente que los empresarios no sepan contra quién compiten en el mercado. Esto demuestra que no han hecho su tarea correctamente. Es posible que los inversionistas ya conozcan la competencia en torno a tu producto o te pedirán que la identifiques. A la hora de hacer tu presentación es imprescindible conocer todas las respuestas a las preguntas de los inversionistas.
También debes identificar cómo se diferencia tu producto de tus competidores en el mercado.
3) No preparar una demo
Ten siempre un prototipo funcional de tu producto o servicio para mostrarlo a tus inversionistas. La demostración les dará una idea sobre lo que es tu producto y cómo funciona. Asegúrate de que tu demostración funciona bien antes de hacerla, ya que un producto con fallas te impedirá llegar a un acuerdo.
4) No ser capaz de responder a las preguntas
Hay que prepararse para las preguntas difíciles que puedan surgir durante la presentación. Si las dejas sin responder o te confundes no causaras una buena impresión. Las preguntas demuestran que el inversionista está interesado en saber más y te ayudan a construir un compromiso de inversión.
Intenta responder a las preguntas en el momento sin dar muchos rodeos. Los inversionistas comprobarán si entiendes tu negocio.
5) No destacar la experiencia y las credenciales de tu equipo
A veces el inversionista no invierte en el producto sino en las personas y el equipo de trabajo que hay detrás. Por eso es vital tener un equipo con habilidades, experiencia y disposición adecuadas. Esto ayudará a convencer al inversionista de que el producto está respaldado por un equipo excelente.
Algunas de las preguntas que puedes anticipar están relacionadas con tu equipo, así que asegúrate de hacer tus deberes.
6) No tener una estrategia de salida
Los inversionistas estarán interesados en saber cómo se utilizará su dinero y cómo se beneficiarán de la inversión. Es necesario que te preparares para discutir cómo se distribuirá la propiedad, el importe de la inversión y la tasa de gastos.
Esta fase pondrá a prueba tus habilidades de negociación y tendrá un impacto a largo plazo en tu negocio. Así que asegúrate de tener preparada una estrategia de salida en tu presentación.
7) No discutir la valoración
Si tu empresa es un emprendimiento y no has generado ninguna venta, no tiene sentido valorar tu negocio inicialmente. En lugar de eso, espera a que el inversionista plantee esta pregunta y discute el valor de tu idea.
De lo contrario, el inversionista te pedirá que respaldes tu valoración en términos de ventas y beneficios, que son triviales en el caso de nuevos emprendimientos.
8) Centrarse demasiado en el producto
Puedes seguir contando a los inversionistas lo brillante que es tu producto, pero no será suficiente para convencerlos de que inviertan. Tienes que identificar la necesidad de mercado para tu producto.
Comparte una historia convincente y entretenida sobre el objetivo de tu producto para que los inversionistas entiendan más fácilmente. No te recibirás ningún capital si no puedes demostrar la necesidad de tu producto.
9) Ser demasiado confiado en tu pitch a los inversionistas
Aunque tener confianza en ti mismo puede ser algo bueno puedes verte arrogante si sobrepasas un cierto límite. Los inversionistas no te considerarán una persona de confianza y probablemente se retirarán.
Debes mantener la humildad durante todo el discurso y responder a las preguntas con gracia y encanto.
Reflexiones finales
Como empresario debes darte cuenta de la importancia de la preparación. Con un poco de trabajo duro e investigación es fácil dar en el clavo y conseguir que el inversionista de tus sueños se sume a tu emprendimiento. Asegúrate de tener los números y las cifras ordenadas además de prepararte con antelación.